viernes, 20 de enero de 2012

Algunos predicadores son culpables de la más fastidiosa tautología, pero no pueden ser acusados de eso cuando su tema es Jesús. He oído declarar a algunos oyentes que su ministro parecía haber traído un organillo del que se podían extraer cinco o seis tonadas y ninguna más, y que las hacía sonar por los siglos de los siglos, amén. Están hartos, muy hartos, de esas vanas repeticiones; pero hasta este día no me he enterado de nadie a quien se le acusara de predicar demasiado a Cristo, o de hacerlo demasiado frecuentemente, o demasiado ardientemente, o demasiado alegremente. No recuerdo haber visto a ningún cristiano salir de una congregación con un rostro afligido diciendo: “exaltó demasiado sublimemente al Redentor; exageró burdamente las alabanzas de nuestro Salvador”. No recuerdo haberme encontrado jamás con un caso en el que los enfermos que languidecían en sus lechos se hayan quejado de que los pensamientos de Jesús fueran agobiantes para ellos. No recuerdo nunca que los cristianos sinceros hayan denunciado a un solo libro porque hablaba demasiado exaltadamente del Señor o le daba demasiada prominencia.

Tautología: repetición de un mismo pensamiento expresado de distintas maneras. Repetición inútil y viciosa.

C. H. Spurgeon - Jesucristo Mismo - Sermón #1388





2 comentarios:

juan manuel currea dijo...

CRISTO EN NOSOTROS ES LA ESPERANZA DE GLORIA, SU NOMBRE ES SOBRE TODO NOMBRE, A EL SEA LA GLORIA POR LO SIGLOS DEE LOS SIGLOS EXALTEMOS SU NOMBRE, AMEN!!!! GRACIAS POR PUBLICAR ESTOS SERMONES QUE INUNDAN DE ALEGRIA EL ALMA, NOS HACEN GRITAR DEE JUBILO A LA ROCA DE NUESTRA SALVACION. DIOS LOS BENDIGA

Anónimo dijo...

Solamente Cristo es nuestra salvación, solamente Cristo es nuestra vida, Solamente Cristo es el Salvador y aunque sean pocas palabras el Objeto de quien se esta hablando es más que mil palabras, no podemos contemplarlo tal como es, pienso que cuando lo veamos cara a cara seremos los más felices y entenderemos solo un poco de Él. Cristo es el Señor y el Centro del Universo, el alfa y Omega, el principio y el fin. Quien por nosotros se hizo pecado sin haber conocido el pecado. El hecho de que nos permita hablar de Él es el privilegio más grande, sigamos contemplandolo, y alegremonos en Él. Que Cristo sea manifestado a través de los creyentes, pidamos al Espíritu que Él viva en nosotros.
Gracia y paz a todos.
Y gracias,
Con cariño. Andrea