martes, 22 de noviembre de 2011

Las traducciones de los salmos que hizo Lutero fueron de tanto servicio como sus discusiones y controversias; y los himnos de Charles Wesley, de Cennick, de Toplady, de Newton y de Cowper, ayudaron tanto en el avivamiento de la vida espiritual en Inglaterra como la predicación de John Wesley y George Whitefield. Necesitamos cantar más. Canten más y murmuren menos, canten más y calumnien menos, canten más y objeten menos, canten más y lamenten menos. Que Dios nos conceda hoy glorificar a Dios, como lo hicieron aquellos pastores, alabándolo.
C. H. Spurgeon - Sermón #666 - Vol. 11

1 comentario:

Fer Conde dijo...

Gracias (Col. 3:16,17)