La santificación es algo de lo que cada creyente es responsable. Los creyentes, como hijos de Dios, tienen el conocimiento del mensaje del Evangelio y tienen una nueva vida y una nueva esperanza en su interior. Todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia (2 Pedro 1: 3). Si los cristianos, a pesar de todo, no son santos, ¿de quién es la culpa sino de ellos mismos? Si no son santificados, ¿a quién pueden culpar sino a ellos mismos? Si el Salvador de los pecadores nos proporciona gracia regeneradora, ¿no deberíamos estar seguros de que espera que usemos Sus dones? Dejar de hacer eso es estar entre quienes, tristemente, contristan al Espíritu.
J. C. Ryle - Aspectos de la Santidad
viernes, 2 de marzo de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Hermano Allan, le saludo de San Luis Argentina esperando que se encuentre bien usted y los suyos. Le quería pedir porfavor en algún momento traduzca el mensaje 172 - Search the Scripture del Señor Spurgeon. Bueno que nuestro Señor les este guiando en todo. Un abrazo
Martín
Publicar un comentario